La UNED tiene una larga tradición de enseñanza de la Criminología y no es la primera vez en su historia que se intenta sacar adelante una titulación superior específica, pero ha habido que esperar hasta este momento para poder dar la bienvenida al nuevo Grado en Criminología, unos estudios muy demandados tanto desde dentro de la universidad como desde fuera, pues han sido precisamente las distintas representaciones de estudiantes las que dieron el definitivo primer paso para consolidar el Grado que se presentó ayer en Madrid y que comenzará a impartirse el próximo curso académico. Estructurado en cuatro cursos académicos, un Prácticum que podrá realizarse de forma presencial o virtual y tres posibles itinerarios de especialización final, el Grado en Criminología de la UNED se presenta como un proyecto colectivo en el que participan cinco Facultades y una Escuela Técnica Superior, que implica a más de 100 profesores y 20 Departamentos y que se diferencia del resto de titulaciones similares precisamente por el enfoque psicológico y social que aporta su carácter multidisciplinar y que sitúa al nuevo Grado en la línea más actual de las corrientes criminológicas.
Así lo destacaron todos los participantes en el acto de presentación que se celebró ayer en el Centro Asociado de Madrid Escuelas Pías y que estuvo presidido por el rector de la UNED, Alejandro Tiana. Le acompañaron Nuria Carriedo López, vicerrectora de Ordenación Académica y Calidad de la UNED; Manuel Díaz Martínez, decano de la Facultad de Derecho, desde la que se coordina el Grado, y Luis Grau Fernández, subdirector de Ordenación Académica del Centro Asociado de Madrid. Tras ellos intervinieron, en una segunda mesa, Juan Manuel Lacruz López, director del Departamento de Derecho Penal y Criminología de la Facultad de Derecho; María Dolores Serrano Tárrega, coordinadora del Grado en Criminología de la UNED; Mariano Melendo Pardos, coordinador de la Comisión para la Elaboración del Grado en Criminología de la UNED, y Alfonso Serrano Gómez, profesor jubilado del Departamento de Derecho Penal y Criminología y uno de los padres de la Criminología moderna de nuestro país.
Alejandro Tiana Ferrer ubicó el Grado en Criminología dentro del contexto actual de la UNED: “Es el primer Grado que se pone en marcha tras la extinción de las antiguas titulaciones de diplomado y licenciado y tras la adaptación de todos nuestros estudios al EEES (Espacio Europeo de Educación Superior), que supuso un arduo esfuerzo para todos. Llega entonces en el momento justo en que la UNED ha de replantearse qué debe ofrecer, tanto a nuestros conciudadanos como a quienes respondan a nuestra vocación de internacionalización”.
“Somos una universidad pública y no nos guía sólo la rentabilidad económica, pero obviamente no nos arriesgamos a aventuras irresponsables”. “Había habido otras propuestas”, recordó Tiana, “pero esta vez el proyecto estaba maduro y en sólo dos años se ha completado el diseño y todo está listo para empezar en el curso 2017/18”.
El rector recordó el nombramiento como doctor honoris causa por la UNED del criminólogo sueco Per-Olof H.Wikström y destacó que “aunque era doctor en Criminología, su formación original procedía de la Sociología. Por eso, comparando el que ahora ofrecemos con otros que hay disponibles desde hace tiempo, veo que nuestro Grado es mucho más moderno, más completo y aporta muchas más posibilidades profesionales. Va justo en la dirección hacia la que apunta nuestra función e imagen social”. En cuanto a la demanda de esta formación, Tiana considera que se ajusta básicamente al perfil de las alumnas y alumnos de la UNED, pues “responde a distintos intereses, a personas con inquietudes y bagajes diferentes. Se ajusta en definitiva, a las necesidades de nuestros estudiantes”. El rector agradeció a los profesores y coordinadores del grado los esfuerzos para ponerlo en marcha “especialmente por apostar por la idea de salir con los dos primeros cursos a la vez”.
Luis Grau Fernández, subdirector de Ordenación Académica del Centro Asociado de Madrid, se mostró seguro del éxito del nuevo Grado. “En nuestro Centro ya está todo listo para acoger a los alumnos que llegarán con la nueva titulación, que va a ser un éxito seguro por el esfuerzo y el buen hacer de quienes la han puesto en marcha y porque está de moda, como demuestra su gran demanda”.
En el mismo sentido se expresó el decano de la Facultad de Derecho, Manuel Díaz Martínez, que albergará la coordinación del Grado en Criminología. “Igual podía estar en cualquier otra de las facultades que han participado, con idéntico entusiasmo, como Psicología, Ciencias, Políticas y Sociología, Filología o la Escuela de Ingeniería Informática. Todos hemos participado por igual y hemos apostado por superar tres grandes retos: uno, atender la demanda social de unos estudios en un momento muy difícil económicamente para la universidad en general y para la UNED en particular y elaborar un plan de estudios serio y riguroso, combinando un trabajo excelente de los profesores de las distintas facultades implicadas; dos, superar un accidentado proceso de acreditación por parte de la ANECA, que incluso requirió la mediación del rector, pese a que el programa estaba desde el principio abocado a su aprobación; y tres, la puesta en marcha de Criminología, con el personal docente y el personal de administración y servicios volcados en la elaboración de materiales y herramientas, de tablas de reconocimiento y convalidación de créditos, formación y experiencia profesional, de información al estudiante y accesibilidad para los alumnos y alumnas que contactan con la Facultad. Y eso que aún no se ha abierto el plazo de matrícula.
Nuria Carriedo López, vicerrectora de Ordenación académica y Calidad, retrató el entorno en que se implanta Criminología en la UNED. “Ahora mismo tenemos 10.000 estudiantes en todo el país, en 21 universidades presenciales y 4 universidades a distancia, ¿cuál es entonces nuestro valor añadido? Nosotros incorporamos las raíces más actuales no sólo del delito desde el punto de vista penal, sino bajo un prisma multidisciplinar, abarcando los orígenes psicosociales”. En cuanto a los aspectos más innovadores del Programa de Estudios, la vicerrectora recordó que “tras tres cursos en común, al llegar a cuarto se ofrecen al estudiante tres itinerarios para especializarse: Mención en Ciencias Penales, en Psicología de la Delincuencia y en Criminología Social”.
Historia de la Criminología en la UNED
Tras las intervenciones de la mesa inaugural, tomaron asiento y turno de palabra los responsables directos de la puesta en marcha del nuevo Grado, entre ellos el profesor ya jubilado Alfonso Serrano Gómez, al que el profesor Lacruz se refirió como “ese gigante sobre el que los demás nos alzamos para llegar más lejos” y que está considerado uno de los padres de la Criminología moderna española. Serrano Gómez hizo un repaso histórico de la enseñanza de la Criminología en la UNED destacando algunos hitos importantes de la misma. “Cuando se crea la UNED”, destacó el experto, “la Criminología era totalmente teórica. Sin embargo, desde el Departamento de Derecho Penal le dimos la vuelta al sistema y comenzamos a hacer una Criminología empírica y real. Por ejemplo, en 1978 realizamos un estudio de más de 2.000 encuestas apoyado por el Ministerio del Interior e Instituciones Penitenciarias para estudiar los factores que podían influir en el comportamiento criminal”.
Desde entonces hasta ahora, la UNED fue construyendo una de las ofertas formativas más amplias y con una mayor aceptación del panorama universitario español, fundamentalmente a través de titulaciones propias pero también en el ámbito de los posgrados y de cursos de diferente formato, siendo larga la tradición de los Cursos de Verano de la UNED en la materia. En cuanto a Enseñanzas Regladas, una parte de la oferta se ha situado siempre en el Tercer Ciclo, tanto en másteres como en Doctorado; finalmente, el plan de estudios del año 2000 de la Licenciatura de Derecho incluyó una asignatura optativa, Introducción a la Criminología, que fue la más solicitada por los alumnos matriculados en dicha titulación, con 11.364 estudiantes en 13 años. En los últimos 30 años, y teniendo en cuenta únicamente los estudios impartidos por el Departamento de Derecho Penal y Criminología, cerca de 15.000 estudiantes han sido formados en diferentes aspectos de esta materia.
Además de la formación, y tal y como destacó Serrano Gómez, han sido numerosos los congresos internacionales celebrados y los libros publicados, materia que se une a la publicada en la Revista de Derecho Penal y Criminología, que se fundó en 1991.
El experto destacó que a este recorrido histórico hay que añadir una aportación muy importante por parte de la UNED: su trabajo en los Centros Penitenciarios: “La reinserción social es difícil cuando se ha pasado por prisión, pero la labor de la UNED es crucial para la recuperación de los internos, que no suelen tener una profesión ni formación ni un entorno social que les ayude al cumplir su condena. Sin embargo, si cursan sus estudios durante su tiempo en prisión, tienen más posibilidad de encontrar un trabajo al salir”.
Por su parte, el director del Departamento de Derecho Penal y Criminología de la UNED, Juan Manuel Lacruz López, hizo referencia a los intentos anteriores por instaurar estos estudios en la universidad y estableció el éxito de esta ocasión en dos factores clave: “metodológicos en primer lugar, por la forma en la que ha trabajado la UNED; y en segundo lugar porque se trata de un proyecto colectivo detrás del cual se encuentran todos los estamentos de la universidad y porque lo que hizo que cambiara la percepción de la UNED acerca de la viabilidad de la implantación del Grado fue la petición activa por parte de todos los grupos de representación de estudiantes de la universidad”. “A partir de ahí”, relató Lacruz, “la primera pregunta que nos hicimos fue ¿es necesario este Grado en la UNED? Y la respuesta fue afirmativa por varios motivos: en primer lugar porque no tenemos suficientes criminólogos y porque la experiencia de otros países, como Bélgica, nos muestra que el auge de estos estudios puede desembocar en el diseño de salidas profesionales para ser cubiertas por graduados en la materia; en segundo lugar, por la importancia de los criminólogos en la sociedad actual, cuyo trabajo se enmarca en áreas tan amplias y variadas como la prevención del delito, la función de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la asistencia en el proceso judicial, el trabajo de los funcionarios de Instituciones Penitenciarias, todos los aspectos relacionados con las víctimas y la mediación y, por supuesto, la propia investigación y estudio de la Criminología como ciencia”.
Finalmente, las intervenciones de Mariano Melendo Pardos, coordinador de la Comisión de Elaboración del Plan de Estudios del Grado en Criminología de la UNED, y de María Dolores Serrano Tárrega, coordinadora del Grado, ahondaron en las características novedosas y particulares del Plan de Estudios que se pondrá en marcha a partir de septiembre, destacando especialmente el hecho de que se comenzaran a impartir simultáneamente los dos primeros cursos.
“Consideramos imprescindible esta idea”, destacaron los ponentes, “pues somos conscientes de que muchos estudiantes verán reconocidas las materias cursadas en otras carreras y dispondrán de créditos suficientes para avanzar en los estudios de Criminología sin necesidad de tener que esperar un año”. Esto ha supuesto un trabajo ímprobo para establecer el sistema de reconocimiento de créditos, “que ya está institucionalizado para los seis estudios de los que esperamos recibir más alumnos, mientras que en otros casos se estudiará de forma individual, y que contemplará también la posibilidad de reconocer créditos por experiencia laboral o profesional hasta alcanzar un 15 por ciento de los totales del Grado como máximo”, tal y como explicó Serrano Tárrega.
La coordinadora destacó la posibilidad que se ofrecerá a los estudiantes de último curso de realizar el Prácticum obligatorio de dos formas distintas ajustadas a las necesidades de cada uno: bien de forma presencial, “tutorizados por los Centros Asociados y gracias a la multitud de convenios que la UNED tiene firmados con diversas instituciones y cuyo número se prevé que sigan aumentando”, o de manera virtual “a través de la plataforma de la UNED”. Esta cuestión, junto a la posibilidad de especializarse mediante tres itinerarios finales fueron algunas de las características destacadas por Melendo en su intervención dedicada al Plan de Estudios. Además, ha hecho hincapié en la “variedad de asignaturas con las que cuenta el mismo y que abarcan desde el Derecho Penal a la Psicología pasando por la Historia del Delito, la Ciencia Política, la Política Criminal, los delitos informáticos, la Criminalística, las Ciencias Forenses y, por supuesto, el inglés”. Un Plan de Estudios completo y variado que responde a las exigencias actuales de la Educación Superior pues, como ha querido destacar Melendo, “hoy en día los catálogos académicos cerrados ya no están de moda.
