Los robos se producían desde el pasado mes de abril y se perpetraban aprovechando la ausencia de los trabajadores o encargados. Los autores de los robos se llevaron 42 cabezas de ganado ovino, 34 baterías pertenecientes a los vehículos agrícolas, así como toda clase de maquinaria; todo ello valorado en más de 14.000 euros. Los agentes sospechaban de un grupo de personas asentados en la Comarca de Vegas Altas y que estarían vendiendo los objetos sustraídos en centros gestores de residuos y a posibles compradores particulares. En dos centros se localizó parte del material sustraído.
La Guardia Civil sigue investigando para localizar el ganado que vendieron presuntamente a compradores particulares y que habrían ocultado los animales en sus explotaciones
