Un particular relacionado con la familia política -en sentido literal- de José Antonio Robles, presentó una denuncia en fiscalía el 2 de marzo de 2017. Casualmente, cuando la otra familia política del alcalde de Güéjar Sierra -la del Partido Popular- se encontraba inmersa en un tenso congreso interno. Y Robles es uno de los baluartes del entorno del presidente provincial, Sebastián Pérez.
La investigación del detective apenas aguantaba una simple búsqueda en Google.
La denuncia se basaba en el informe pericial de un investigador privado que -según alegó también el propio Robles- pudo haber sido concejal del PP en Cenes de la Vega en 2007 pero el partido -y él en concreto- le aconsejó que desistiera porque «estratégicamente se consideraba lo mejor».
El informe entregado en la fiscalía sostenía, entre otras presuntas irregularidades, que el alcalde de Güéjar Sierra tenía parte en tres sociedades, al margen de figurar como administrador o consejero de diversas empresas públicas. Además, añadía que desde el Ayuntamiento se había contratado a estas empresas.
La Fiscalía Provincial ha archivado las diligencias abiertas para investigar los presuntos delitos de prevaricación y tráfico de influencias, entre otros. En un decreto fechado a finales de mayo, el fiscal desmonta todas las acusaciones. De entrada, el administrador de las empresas señaladas como sospechosas es otro José Antonio Robles Rodríguez distinto, con igual nombre y apellidos pero con distinto DNI. Según la información recogida por la Guardia Civil, estas empresas tampoco han trabajado nunca para el Ayuntamiento de Güéjar Sierra.
El denunciante también sostenía que la esposa del alcalde y diputado provincial trabaja en una sociedad que ha tenido intereses con el Consistorio. «En relación a las posibles irregularidades en la contratación de familiares por empresas que supuestamente se habrían beneficiado por la adjudicación de obras por parte del Ayuntamiento, se ha podido comprobar que, en relación a la mercantil en la que trabaja la esposa del alcalde, la secretaria (del Ayuntamiento) manifiesta que no le ha sido adjudicado obra alguna pese a que ha participado en algún procedimiento. Por ello no se advierte en dichos hechos ilícito penal alguno», concluye el fiscal en el decreto de archivo.
Otro de los puntos de la denuncia era la adjudicación de un conocido restaurante del pueblo al suegro del alcalde. En el repaso del expediente, el fiscal advierte de que la concesión data de 1993, el contrato de arrendamiento se firmó cuando era regidor de Güéjar Sierra José Antonio Balderas y hubo una modificación ya en la etapa de José Antonio Robles pero cuando estaba aún soltero: «Dicha adjudicación fue llevada al pleno y aprobada por mayoría absoluta».
También descarta irregularidades en las subvenciones recibidas para la construcción de un hotel rural.
publicado por El Ideal.
